Sudáfrica eligió a España

Entre vuvuzelas, el ritmo del Waka-Waka, y los pronósticos del Pulpo Paul, el Mundial de Sudáfrica echó el cierre.
Lo hizo con un digno y merecido campeón, España. La Roja propuso fútbol, y con más o menos suerte, demostró los galones y talento que atesora. En la final su contrincante, Holanda, propuso anti fútbol, por no decir otra cosa, deshaciendo la historia de la Naranja Mecánica. Ser más prácticos y menos creativos, no tiene que ser sinónimo de éxito. Si no, que se lo pregunten a los pupilos de Del Bosque. Es verdad, que el fútbol creativo de España adolece de cierta verticalidad y que está abonada demasiado al resultado por la mínima, la ansiedad colectiva y la falta de un plan B. Sin embargo, entre tanto Tiki-Taka, esta vez, y lo digo por los dos últimos años, la historia nos ha devuelto la suerte que tanto nos negó.

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El gol de Iniesta supuso el grito al unísono de por lo menos veinte millones de españoles. Un Iniesta, que de menos a más, como la propia selección, debió ser galardonado como “Balón de Oro” del Mundial. El reconocimiento cayó en Forlán, que no es que no hiciera méritos, pero de ahí a ser proclamado rey de la competición hay un trecho. Me parece sobre todo sospechoso que la FIFA recurra a métodos tercermundistas para esto, y no lo digo por la votación de los periodistas, que se fijaron en el bueno de los modestos, porque Uruguay hoy en día es una selección algo modesta, lo digo porque se tendría que fijar en deportes como el baloncesto dónde el mejor jugador sale de la final y el 60% de las veces es el jugador decisivo de dicho partido. Pero no solo esto culpa a la FIFA, también la negativa a adoptar tecnologías para el fútbol o por las elecciones de chiste de árbitros de poco nivel para los partidos trascendentales.
Este Mundial empezó acercándose al adjetivo llamado bodrio y terminó siendo un interesante y entretenido espectáculo más allá del fútbol. Como nota final lo dejamos en un aprobado. Aunque eso de nuestro triunfo nos deje un gran recuerdo y un gran legado. Porque de fútbol poquito. Solo partidos contados con las manos se salvaron. Otra cosa es si hablamos de jugadores. Muller, Busquets, Ponce, Ozil, Hernández, Gyan, demostraron que son talento del momento y también talentos del futuro. Brillaron, algunos se podría decir que no decepcionaron, jugadores como Robinho, Robben, Xavi, Villa, Klose, Casillas, Khedira, Friedrich, Piqué, Maicon, Messi, Higuaín. . Decepcionaron Ronaldo, Van Persie, Torres, Rooney, Terry, Ribery, Felipe Melo, y fracasaron Inglaterra, Italia y Francia.
Sudáfrica 2010 ha sido el comienzo para romper las barreras de lo que se presumía imposible. La historia es dura, pero es eso historia. Y tanto África como España, conjugaron a la vez sus primeros grandes triunfos y su primer reconocimiento mundial. Esto también es ya historia.